ABOGADO DEFENSOR ESPECIALISTA EN DELITOS CIBERNÉTICOS

El delito cibernético pertenece a un área legal relativamente nueva y de rápido crecimiento. Son demasiadas las personas y los abogados que piensan que los delitos cibernéticos son como cualquier otro delito. A simple vista, tienen similitudes. Un fraude cometido a través de una computadora parece igual que uno cometido por medios tradicionales: La posesión de pornografía infantil en una computadora se parece a la de las revistas. Sin embargo, el hecho de que parezcan iguales no significa que sean iguales. No nos equivoquemos: el delito cibernético es un área completamente nueva de la ley con sus propias normas. Involucra nueva tecnología y, por lo tanto, estrategias de defensa distintas. Abarca conceptos como “piratería”, la “web profunda”, la “web oscura”, “Botnet”, etc.

Sin saber qué son estas cosas y cómo funcionan, un abogado no puede montar una defensa exitosa contra las acusaciones. En Boyle & Jasari, nuestros abogados especializados en delitos cibernéticos comprenden el impacto que los cargos federales pueden tener en su reputación, carrera y familia. Nuestros abogados especializados en delitos cibernéticos son profundos conocedores de la materia y comprenden el impacto que los cargos federales pueden tener en su reputación, carrera y familia. Póngase en contacto con nuestro Bufete Legal para obtener la asistencia y el apoyo que necesita.

Representación segura de un abogado especializado en delitos cibernéticos

Escuchar la frase “actos delictivos en el ciberespacio” a menudo nos hacen imaginar a piratas informáticos en habitaciones oscuras que causan estragos en empresas e individuos por igual. Si bien los delitos cibernéticos pueden incluir tal escenario, el término se refiere a una amplia gama de ilícitos. Por ello, es vital para su defensa contar con un abogado que tenga:

• Un conocimiento profundo de la informática y la tecnología relacionada con la web, incluida la web oscura.
• Un conocimiento integral del proceso penal federal, incluyendo la forma en que los fiscales realizan investigaciones sobre delitos cibernéticos y cómo recopilan las pruebas.
• Familiaridad respecto a los virus, malware, etc., que potencialmente pueden convertirlo a usted en el chivo expiatorio de la comisión del delito por parte de otra persona.
• Conocimiento sobre cómo opera la web oscura. A menudo, ésta puede servir como una ventana a los últimos avances y tendencias en ciberdelincuencia.
• Educación continua, en un campo del derecho que está en plena evolución.

Las sanciones para los delitos de cuello blanco han aumentado sustancialmente a lo largo de los años. La Reforma a la Ley de Sentencias de 1984 eliminó la posibilidad de libertad condicional para los condenados por actividades delictivas federales. En 2022, la Ley de Reforzamiento de Penas para Delitos de Cuello Blanco incrementó las penas para varios tipos de fraude. Además, muchos presuntos actos delictivos pueden cumplir el criterio de múltiples cargos, lo que agrava la severidad de las sanciones. Las condenas por múltiples cargos penales de cuello blanco pueden conducir a décadas de reclusión en una prisión federal.

Los abogados especializados en defensa contra delitos cibernéticos de Boyle & Jasari están aquí para ayudarlo. Ya sea que usted esté actualmente bajo investigación o que haya sido acusado formalmente, programe su consulta hoy.

¿Qué son los delitos cibernéticos?

Los delitos cibernéticos se dividen esencialmente en cuatro categorías principales: “Hackeo” y delitos relacionados; fraudes y estafas en Internet; pornografía infantil o posesión de otros archivos de contrabando; y delitos contra la seguridad nacional. Todos ellos tienen antecedentes en el derecho penal tradicional.

Hackear es similar a romper y entrar. Tradicionalmente, anteriormente cuando las fuerzas del orden efectuaban investigaciones, lo que hacían era entrevistar testigos y buscar pruebas forenses en la escena del delito, como por ejemplo las huellas dactilares. Los fraudes complicados requerían una conspiración para robar grandes cantidades de dinero y las fuerzas del orden, una vez que identificaban a un participante de la asociación delictuosa, podían aprovechar esa “cooperación” para identificar a otros involucrados en el delito. Cuando la policía recopilaba suficiente información para soportar una “causa probable”, podía obtener una orden de registro y encontrar los materiales de contrabando en la residencia o negocio de un individuo sujeto a investigación.

No obstante, cuando se emplea una computadora para cometer un delito, las pruebas desarrolladas y las técnicas de investigación utilizadas son diferentes. Para la mayoría de los abogados, el proceso de investigación se parece a una caja negra. Los peritos del gobierno identifican un probable implicado en el ilícito. Posteriormente, un tribunal otorga una orden de allanamiento. Se incautan las computadoras personales, los teléfonos celulares y otros medios electrónicos del acusado. Otro perito del gobierno “examina” una computadora y emite un informe diciendo que el acusado cometió el delito. Si el abogado defensor no comprende la ciencia detrás de los peritajes del gobierno, solo tiene la opción de declarar culpable a su cliente o de ir a juicio sin estar preparado.

El problema de confiar en los peritos del gobierno cuando usted es un abogado defensor es que no todos los “peritos” del gobierno son realmente expertos e, incluso, los que lo son cometen errores. Tomemos el caso de Michael Fiola, por ejemplo. [1] El Sr. Fiola fue empleado en el Departamento de Accidentes Industriales de Massachusetts. Durante una revisión de rutina, se descubrió que tenía una cantidad significativa de pornografía infantil en su computadora portátil, por lo que fue despedido y las pruebas entregadas al Fiscal de Distrito, el cual lo acusó de varios delitos graves.

Eventualmente, gracias a la decidida representación del abogado defensor que entendió los delitos informáticos y contrató al perito correcto, se retiraron todos los cargos, pero no antes de que el Sr. Fiola tuviera que gastar $250,000 dólares en su defensa.

Luego está el caso de Julie Amero, una maestra suplente de Connecticut que fue acusada de riesgo de lesión a menores de edad, cuando una computadora portátil que ella usaba en clase comenzó a mostrar imágenes pornográficas a sus alumnos. La acusación en su contra también fue retirada después de que peritos informáticos independientes encontraron un spyware malicioso que estaba descargando las ventanas emergentes sin su conocimiento.

Desafortunadamente, los casos del Sr. Fiola y la Sra. Amero no son aislados. De hecho, es probable que haya muchas personas inocentes en prisión debido a investigaciones defectuosas y a la falta de experiencia de los peritos del gobierno. Los piratas informáticos son cada vez más sofisticados: Los cortafuegos y otras medidas de seguridad informáticas se pueden eludir, por lo que el equipo de cómputo de cualquier persona se puede convertir en una computadora “zombie”, mediante el uso del programa Trojan Horse. Una vez que esto sucede, la computadora puede usarse para realizar actos maliciosos o ilegales en cualquier parte del mundo sin el conocimiento del propietario. Peor aún, el programa Trojan Horse que se utiliza para tomar el control del equipo de cómputo podría ser casi imposible de encontrar e, incluso, puede desaparecer después de que haya completado su función.

Aspectos internacionales del delito cibernético

Los delitos cibernéticos se pueden cometer en cualquier lugar, y el gobierno de los EE. UU. hace todo lo posible para detener a los responsables en cualquier parte del mundo. Un ciberdelincuente en Rusia puede cometer un delito contra un estadounidense sin siquiera haber puesto un pie en los Estados Unidos, o podría ser “enganchado” por otra persona para parecer culpable. Gran parte de nuestra clientela tiene su sede en el extranjero y nosotros podemos y de hecho manejamos casos complejos, independientemente de dónde se originen.

¿Qué debe usted hacer si lo acusan de un delito cibernético?

Si usted es sospechoso de haber cometido un delito informático, lo primero que debe hacer es llamarnos. La presión para hablar con los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley puede ser fuerte, pero hacerlo sin un abogado presente generalmente no es lo correcto. Las cosas que se dicen pueden sacarse de contexto y puede que los comentarios excluyentes de responsabilidad no queden registrados. Lo mejor es esperar a un abogado, antes de decidir si coopera o no con la autoridad.

¿Por qué elegir los abogados especialistas en delitos cibernéticos de Boyle & Jasari?

La naturaleza evolutiva de la actividad delictiva cibernética ha creado una situación única en el sistema legal. Los casos ganados y perdidos están definiendo actualmente el panorama de cómo se procesarán los cargos en el futuro. Si bien la mayoría de las acciones de defensa en los procesos penales generales implican estrategias estándar ajustadas a cada conjunto de circunstancias, los procedimientos por acusaciones de delitos cibernéticos –en contrapartida– deben defenderse utilizando tácticas creativas basadas en los avances y conceptos tecnológicos más recientes. Los virus, el ransomware o el hackeo del Internet de las Cosas de hoy no serán los mismos mañana. Por lo tanto, si usted o un ser querido es acusado de cometer un delito cibernético, necesitará un abogado defensor especialista en delitos cibernéticos con conocimientos en asuntos complejos relacionados con la informática.

Debido a su móvil financiero y sus medios no violentos, los delitos cibernéticos se consideran de cuello blanco. El abogado Dennis Boyle tiene una amplia experiencia en el ámbito penal y en actividades delictivas de cuello blanco, habiendo participado en más de 200 juicios penales ante jurado en tribunales estatales y federales en todo Estados Unidos. Especialmente, ha ganado varios casos emblemáticos.

La actividad delictiva cibernética generalmente se persigue a nivel federal. Al considerar contratar un defensor penal para delitos cibernéticos, es importante saber que los abogados deben contar con autorización para ejercer en tribunales federales y, en particular, en el tribunal federal en el que se tramitará su caso, por lo cual no cualquier abogado defensor podrá representar sus intereses.

El abogado Dennis Boyle está certificado como especialista en juicios penales por la Junta Nacional de Abogados de Tribunales. También tiene autorización para ejercer en los tribunales federales del Distrito de Columbia, Pensilvania, Nueva York, Maryland, Alaska y muchos otros en todo el país. Además, el abogado Boyle ejerce en muchos tribunales internacionales, incluido el Tribunal Penal Internacional de La Haya, Países Bajos.